miércoles, 15 de julio de 2015

MARIE STILLMAN

Marie Spartali Stillman (1844-1927) es una mujer y pintora que me fascina. Nació en Londres y era la hija pequeña de una familia griega muy acomodada. Su padre organizaba veladas culturales en las que invitaba a destacadas personalidades del mundo del arte y de la literatura.

La belleza de Marie no dejaba impasible a nadie, era tan perfecta que llegaba a ser perturbadora. Uno de los poetas que frecuentaban su casa llegó a decir: "es tan hermosa  que querría sentarme a llorar".

En los ambientes más exclusivos sus dos primas y ella eran conocidas como "las tres gracias" y sirvieron como modelos y musas inspiradoras de los pintores "prerrafaelitas" (movimiento que quiso recuperar la más pura esencia del arte gótico). Ella misma empezó a estudiar el arte de la pintura con Ford Madox Brown y tuvo gran influencia de los que la habían pintado...

El cuadro que vemos arriba es un autorretrato. Siempre pintaba hermosas figuras femeninas y preciosos paisajes y hacía referencia a Dante y Boccaccio. Su carrera fue muy dilatada, duró unos sesenta años y produjo más de cien cuadros que fueron expuestos en las salas de arte más prestigiosas de Ingalterra y los Estados Unidos.

En 1871 se casó con un viudo cuya esposa se había suicidado y dejaba tres indefensos hijos que ella quiso y cuidó como una verdadera madre. Su marido, el periodista americano W.J. Stillman no era en absoluto el hombre ideal con el que su padre había soñado. El periódico The Times (para el que trabajaba) le mandó de corresponsal a Roma y Florencia y ella tuvo que compaginar, muy difícilmente, sus tareas de ama de casa y su pasión por la pintura. El matrimonio había tenido un hijo, con lo cual eran cuatro los que requerían sus cuidados y atenciones...

Fue una liberación volver a Inglaterra en 1898, cuando él se retiró y trasladarse a Surrey, lugar donde pudo vivir hasta su fallecimiento donde fue enterrada junto a su amado esposo.

Fue el pintor Rossetti quien se atrevió a decir que su "musa" había nacido con tres dones: la belleza, la sabiduría y la promesa de ser amada por el hombre más extraordinario de su tiempo, pero que el último no se había materializado...
Pero yo pienso que ella fue consecuente consigo misma y eligió su vida siendo a lo largo de los años "guardiana de la pureza de la tradición, de la verdad, de la enseñanza auténtica y arcana que permanece inmutable a través del tiempo" pues jamás renunció a sus raíces griegas...

No hay comentarios:

Publicar un comentario