jueves, 2 de julio de 2015

CUENTO DE LUZ

Ana Eulate ha cumplido su sueño: crear una editorial que lucha por un mundo mejor. Dejó un trabajo seguro y bien remunerado (en plena crisis) y cambió los despachos por el garaje de su casa reconvirtiéndolo en su oficina.

Su proyecto no sólo ha resultado ser rentable (los números cuadran) sino que ha recibido importantes premios internacionales y tiene muchos seguidores en las redes sociales. Su éxito tan inmediato (la editorial nació en mayo del 2010) se debe a que el 70% de sus libros se venden en el extranjero.

Ana es una mujer  "extraordinaria" (creativa, innovadora, emprendedora y solidaria) y "Top 100 mujer líder en España 2013 como emprendedora revelación". Licenciada en Filosofía e Historia, cuando terminó sus estudios trabajó en una pequeña editorial y por sus diferentes profesiones ha vivido en Río de Janeiro, Bruselas y Londres. Pero siempre ha escrito, desde muy pequeña, y cuando llegó el momento creyó, soñó como lo quería y se atrevió a embarcarse en la aventura de llevar a cabo su proyecto.

Todo surgió del corazón, sin grandes expectativas pero con muchísima ilusión. Quería enviar mensajes con valores universales que funcionasen en todas las culturas; invitar a estimular la imaginación, acercar al lector a la diversidad, educar para la paz y sensibilizar sobre el cuidado del planeta. Todos los libros se traducen al inglés y cuenta con un magnífico equipo de escritores e ilustradores internacionales cuya característica común es su gran calidad artística y humana. Mediante la ecoedición protege y cuida la naturaleza.

El simbolismo de la luz es un concepto universal, pues luz significa vida, aprendizaje, conocimiento, claridad, creatividad.... y la creatividad es dar a luz, producir con flexibilidad, originalidad y sensibilidad. El niño vuela como los sueños, entre las nuebes y los libros simbolizan nuestro interior. Su filosofía va más allá de la literatura, ella pretende sacar al niño interior que todos llevamos dentro. Sus historias son mensajes universales que no entienden de fronteras y que son puentes entre la imaginación y la reflexión.

Me encantan sus cuidadísimas ediciones con ilustraciones cuasi-artesanales que son el auténtico sello de la casa.

"Una mañana el erizo se despierta con un misterioso ovillo de lana clavado en sus púas. Los animales del bosque se acercan curiosos a su casa y el erizo teje algo especial para cada uno de ellos (tricotí, tricotá, una puntada por aquí, una puntada por allá). Algo asomobroso e inesperado ha ocurrido... ¡el ovillo es mágico!"

El cuento encierra valores como la amistad, la generosidad, la empatía... saca a relucir lo mejor de cada lector y le despierta la necesidad de ayudar a los demás.

Gracias Ana por volcarte en la labor de contar historias que "iluminan y no que adormecen"

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