jueves, 6 de noviembre de 2014

KATE O´BRIEN

En los últimos veinte años Kate O´Brien ha pasado de ser una gran desconocida a convertirse en una de las figuras claves de la lieteratura irlandesa contemporánea.

Su obra suscita un enorme interés por el tono franco y anticonvencional de los temas que trata, en especial su retrato de mujeres que hacen frente a las limitaciones de una sociedad extremadamente conservadora e intolerante.

Tuvo una intensa y prolongada relación con España, país que la sirvió de inspiración para dos de sus nueve novelas. Llegó a Bilbao en 1922 como institutríz y fue cautivada por un lugar y unas gentes que inmediatamente hizo suyas. Pasado un año volvió a Irlanda, pero regresaba todos los veranos a España. Ningún otro lugar del mundo había atrapado de tal forma su corazón. En ella encontró la tierra de la belleza mística y de la pasión combinada con la austeridad. La diversidad geográfica, sus contrastes humanos, la enorme fascinación que sintió por Castilla y su pasado histórico, la condujeron a ser una ferviente lectora de las obras de Santa Teresa, lo que la sirvió para introducir en su universo literario a personajes femeninos valientes, decididos, transgresores, que no encajaban con las expectativas sociales del momento ni con los roles que la sociedad tradicional les asignaba.

Se centró en el esplendor de la Castilla del siglo XVI e investigando sobre la Santa y leyendo sus cartas, apareció Ana de Mendoza (la princesa de Éboli), por la que se sintió magnetizada desde el primer momento. Ambas, cada una a su manera, fueron mujeres de acción, decididas, que lucharon por su autonomía personal sin el menor complejo ante el poder establecido.


Los libros que escribió sobre ellas, Teresa de Ávila (1951) y Esa Dama (1946), no son sesudos trabajos de investigación ni exhaustivos estudios biográficos, sino una forma amena de acercar al lector la inteligencia, humildad, tenacidad y plena determinación de cumplir con su destino que caracterizaba la personalidad de ambas.



Es maravilloso pensar que un pueblecito de la provincia de Ávila, Gotarrendura, haya dedicado una de sus calles a esta escritora irlandesa enamorada de España, de su paisaje y de su paisanaje. Me prometo a mí misma visitarlo lo antes posible...


Nada me gusta más que descubrir a autores que desconocía y que, sin embargo, desde el momento que su obra llega a las estanterías de mi biblioteca, forman parte de mi vida de una forma tan entrañable que parece que les conozco de toda la vida...

Y es eso lo que me ha ocurrido con Kate...












1 comentario:

  1. Fantástico artículo. La princesa de Éboli y Santa Teresa, dos mujeres fascinantes; enormemente valientes e inteligentes pero enfrentadas entre sí. La Santa de Ávila conseguía doblegar la altivez de doña Ana. El próximo año se cumplen 500 años del nacimiento de Teresa (1515), la primera Santa carmelita, doctora de la Iglesia. En Santa Maria della Vittoria, en el corazón de Roma, ya le dedicó Bernini una de sus obras más representativas; casi acababa de morir y ya tenía una obra de tal magnitud dedicada a su ersona.¡Realmente impactante!
    Gracias Amparo por este precioso recuerdo a tantas mujeres admirables.
    Ana C

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